Quiero convertirme en palabra.
¡Déjame ser leída!
Insistiendo en el tono
antes vestido
de blanco inmaculado.
Que tu voz escriba mi nombre
mientras tinta y verso se aman
heridos de poesía derramada...
henchida de locura
brotando de tus labios.
¡Dime poeta!
Grave y cálida tal cual
me concibes.
Enlazada en las rimas
del corazón
que adviertes.
¡Se atrevido!
¡Hazme verbo!
En cada acción que tus trazos hallen
estaré yo, inevitable, presente.
Y subiré al cielo de tus musas
y rendiré mi cuerpo a tu ternura
y seré toda para ti.
¡Escríbeme ahora!
Soy ...
tu libertad.
Que hermosa manera de tejer un manto de versos donde cada letra es una nueva estrella en el brillante firmamento de tu poesía.
ResponderEliminarBesos Poeta!!!!!
Gracias por tus visitas incondicionales y sobre todo orgullosísima de que mis versos te transmitan pues para ello se escriben, para llegar a quien los lee y despertar bonitas sensaciones. Un abrazo Acróbata!
ResponderEliminarPreciosooooooooooooo!!
ResponderEliminarGracias Mayte, preciosaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa!!!
ResponderEliminarMuy bonito, eres capaz de conseguir que yo, que no entiendo lea poesía. Te leo siempre, pero casi nunca digo nada... Besos miles
ResponderEliminarGracias Lola, me encanta tu comentario. ¿Sabes? A mí alguna vez me han colgado la etiqueta de "mala poeta" porque utilizo pocas figuras retóricas y un lenguaje demasiado sencillo. Precisamente es lo que necesita la poesía, lo hago así con toda la intención del mundo, para que llegue a todas partes y cada cual la disfrute y la haga suya. Un abrazo gigante, de corazón.
ResponderEliminarMe encanta el poema Ana María y me encanta ese comentario a Lola, quien puede permitirse el lujo de hablar de buenos y malos poetas, llevo leyendo poesía desde que tengo recuerdos, la poesía tiene que pellizcarte el alma, tiene que llegar, la calidad literaria que algunos buscan insistentemente y por sistema hace, que se quede el sentimiento perdido entre esas figuras retóricas y no se llegue a percibir.
ResponderEliminarA mi tu poesía me invade, la siento, la vivo, eso es lo que necesito al leer poesía. Un beso Ana
Mil gracias Ana, es cierto, la poesía es un pellizco directo al alma. Cuando se rebusca demasiado se convierte en perfecta pero lejana. Me encanta encontrarte por aquí. Un montón de besos.
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