jueves, 29 de diciembre de 2011

Felicidad, siempre...



Ni quiero,
ni puedo,
ni pienso hacer balance de este año que se va,
ni de ningún otro que esté por llegar.

Que me guíe el corazón...

sábado, 24 de diciembre de 2011

HOY, MAÑANA, SIEMPRE...



Que la Navidad vuelva a recobrar su verdadero sentido.

Que los sueños y la magia no pasen obligatoriamente por el consumismo.

Que en el corazón guardemos siempre un lugar preferente para los demás.

Mis mejores deseos para todos vosotros... todos los días de vuestra vida. A.A.

martes, 13 de diciembre de 2011

EN ROJO...




Absolutamente en rojo.

Cada hoja trémula
estrecha su voz,
abierta
a la gravedad
de mi acento.

Cada peldaño insiste,
asciende en futuro,
eleva
el pulso preciso
de mi sencillez.

Cada indiferencia...
cada verdad...
cada temblor...

Abraza, atrae, acaricia...
impulsa cada tono.

-Obra cada sueño libre-


"EN LA PIEL DEL VERSO" (2011)

domingo, 11 de diciembre de 2011

POR TODA LA ETERNIDAD...




He visto tu alma

instalada en mis ojos.

He tocado tus manos

a través de mi tacto.



Has unido latidos

desde el primer aliento,

detenido el vacío,

avivado el amor,

despertado los besos...

Has prendido mis sueños.



Eres brújula de cielo

infinitamente limpio.

Caricia constante y entrega absoluta.



Eres mi norte.



Soy aquella que prestó

su carne a tu palabra.



Mira tú también mi alma,

es tuya...

por toda la eternidad.



-Te quiero-.







Feliz cumpleaños, tesoro.

Para mi hijo, David.

lunes, 5 de diciembre de 2011

La palabra precisa, siempre existe un poema a la medida de nuestras almas. Y éste es el tuyo, madre...



PABLO NERUDA

Me gustas cuando callas porque estás como ausente,
y me oyes desde lejos, y mi voz no te toca.
Parece que los ojos se te hubieran volado
y parece que un beso te cerrara la boca.
.
Como todas las cosas están llenas de mi alma
emerges de las cosas, llena del alma mía.
Mariposa de sueño, te pareces a mi alma,
y te pareces a la palabra melancolía.
.
Me gustas cuando callas y estás como distante.
Y estás como quejándote, mariposa en arrullo.
Y me oyes desde lejos, y mi voz no te alcanza:
Déjame que me calle con el silencio tuyo.
.
Déjame que te hable también con tu silencio
claro como una lámpara, simple como un anillo.
Eres como la noche, callada y constelada.
Tu silencio es de estrella, tan lejano y sencillo.
.
Me gustas cuando callas porque estás como ausente.
Distante y dolorosa como si hubieras muerto.
Una palabra entonces, una sonrisa bastan.
Y estoy alegre, alegre de que no sea cierto.